Desde los albores de la civilización, los niños han sufrido el abandono, el abuso y la violencia por parte de personas mayores, entre ellos sus propios padres. Hoy, el maltrato de los niños es una de las formas de agresión que llamamos "increíbles" o "aberrantes", quizá porque todavía no estamos preparados para afrontar directamente este trágico problema. La impresión primera es que se debe tratar exclusivamente de agresores psicóticos, condicionados por el alcohol o las drogas, o abrumados por la pobreza. La realidad es que la explotación de los niños no tiene fronteras de estados mentales ni clases sociales, y que lejos de estancarse en formas tradicionales evoluciona a la par que la sociedad. El programa que la UNED ofrece en La Aventura del Saber plantea una reflexión en profundidad sobre el tema.
Una propuesta de Paloma Chorot y Margarita Olmedo