El concepto de actitud estética se sitúa en el epicentro de las preocupaciones de la disciplina, en especial, por las consecuencias inmediatas que tiene en el campo de la teoría del arte. La adopción de una actitud genuinamente estética implica la puesta en valor de la apreciación de un objeto desde una perspectiva que lo libera de sus finalidades funcionales, lo que no deriva en una modificación del objeto, sino en una modificación del punto de vista del observador.
Proponemos: 1) Una periodización de la forja del concepto a partir de una lista fundamental de autores y obras que habrían contribuido decisivamente al desarrollo del concepto. 2) Un estudio detenido de la estructura del mismo y de las principales consecuencias prácticas que acarrea en el campo de la obra de arte, en especial, en lo tocante a su estatuto ontológico, epistemológico e institucional. 3) Un balance del estado de la cuestión en el pensamiento estético contemporáneo, en especial, en su vertiente analítica.
CA. A Coruña: Ciclo “Investigaciones y prácticas actuales en Filosofía” - ¿Qué es la actitud estética?